Puntos Cubanos
Los puntos cubanos están arraigados en nuestra cultura y viven profundamente en nuestro folclore canario tradicional. Su musicalidad, combinada con el dictado y la improvisación, hace de este género cantable de la música canaria y cubana un motivo de identidad y razón de orgullo.
Declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en 2017, sus orígenes se remontan al siglo XVI, con referencias en Málaga asociadas al poeta Vicente Espinel.
Historia del Punto cubano
Lo Puntos cubanos no son exactamente creaciones cubanas, sino canarias traídas desde Cuba por los emigrantes que volvían. Algunos investigadores cubanos explican que en los lugares y provincias donde había mayor flujo de inmigrantes canarios, presentaban una mayor intensidad en esta forma de poesía improvisada.
Desde la prudencia, el punto cubano-canario l canario-cubano debe ser un género considerado de «ida y vuelta». Dada la especial relación entre Canarias y Cuba, esto no es de extrañar. Desde el momento de la conquista, que dura hasta el comienzo de la revolución, la forma en que los campesinos cubanos cantan la décima es semejante a la de los campesinos canarios.
En Canarias hubo un género de décima de especial importancia, principalmente en la isla de la Palma, en la época de mayor inmigración de canarios a Cuba. Cabe destacar que a finales del XIX y principios del XX, las únicas cartas que procedían del extranjero eran de Cuba, tanto de ida como de vuelta, todas ellas escritas en décimas.
Tipos de Puntos cubanos
El esquema musical traído de Cuba por los canarios, consiste en una una técnica de expresión que se divide en tres categorías:
La Décima
Esta es una estrofa octosílaba de diez versos que se originó en la poesía literaria del siglo XVI. Con el tiempo se hizo cada vez más popular, sobre todo en Canarias, especialmente en la isla de La Palma.
La décima es uno de los elementos del punto cubano que irrumpió en Canarias a principios del siglo XX donde los contadores son portadores de historias que cuentan hechos reales.
En la década de 1990, M. Trapero comentaba la decadencia de la décima en Canarias, a causa del escaso número de poetas que se expresan en décimas y la juventud que ya no improvisa de memoria.
Décima en controversia
El décima en controversia es el punto cubano más tradicional. El protagonista es el versador, que canta de manera improvisada. En Cuba se les llama «repentistas».
Se podría incluir el Punto cubano como una canción de cosecha o un canto relacionado con el trabajo. En Cuba se asocia a trabajos relacionados con el ron y el tabaco.
En la localidad de Mazo de La Palma, en la fiesta del Borracho a finales de agosto, se realiza un culto al vino, que coincide con el encuentro de puntos cubanos. Si el origen del punto cubano se relacionó con el trabajo, luego luego lo hará con la fiesta de la cosecha.
Décima encadenada
La décima encadenada es una estrofa de número y contenido variado, como la sequía, erupciones volcánicas, adulterios o tragedias, donde en muchas ocasiones el autor se escondía bajo un seudónimo.
Solían recitarse o cantarse a las puertas de las iglesias, y así lo hacían sus propios autores, donde predominaban los varones sobre las mujeres. Este tipo de décima es típica de entornos rurales remotos.
Monólogo
En el Monólogo es donde la mujer tiene el mayor protagonismo. A diferencia de las anteriores, este tipo de versos no es improvisado, sino de memoria.
¿Cómo se tocan los puntos cubanos?
El punto cubano se toca con un conjunto de instrumentos de cuerda pulsada, que incluyen guitarra española, tres, laúd y timple. También pueden intervenir tres instrumentos de percusión: clave, güiro y guayo.
Los contadores actúan como solistas o dúos «enfrentados», improvisando décimas. Cuando cantan, crean espacios entre versos. Estos espacios a menudo están llenos de magistrales interpretaciones del laúd, lo que le da tiempo al cantante para componer los versos que siguen.
Diferencias entre los Puntos cubanos de Cuba y Canarias
Hay algunos matices únicos en el Punto cubano Canario, sobre todo a nivel musical. En La Palma, por ejemplo, se conservan las melodías antiguas y lentas con interludios más largos. Además, los elementos rurales son más destacados. En Cuba, se utilizan más las figuras literarias y las expresiones canarias son más sencillas y directas.