Tajaraste
Canarias cuenta con una gran variedad de cantos y bailes, entre los que merece una mención especial el baile indígena Tajaraste. La música tradicional canaria es el resultado de las diversas influencias culturales.
Los tintes europeos y americanos se han mezclado con ritmos autóctonos que han sido rescatados y conservados a lo largo de la historia. Aunque se conservan las tradiciones, la música canaria adquiere personalidad propia, dando como resultado un estilo más diverso.
Baile
Hoy en día, el tajaraste es especialmente conocido en La Gomera como «Baile del Tambor«, mientras que en Gran Canaria ha desaparecido casi por completo.
En Tenerife, este es un baile típico de la región de Icod de los Vinos. Aquí, bajo el nombre de «Tajaraste de El Amparo«, adquiere un carácter que lo hace único en su género. Sus bailarines forman una rueda y saltan de un lado a otro hacia el centro. Como antaño, el baile se acompaña con tambores y chácaras.
Origen del Tajaraste
El tajaraste toma su nombre del antiguo tambor o pandereta que acompañaban a los aborígenes que habitaban las Islas Canarias en la época prehispánica. Esta alegre y animada danza emigró a la península entre 1478 y 1496, cuando los guanches fueron vendidos como esclavos tras su conquista.
Rápidamente saltó a la fama en el mundo de la música tradicional y la corte española, para extenderse luego por todos los palacios de Europa, manteniendo su nombre y estructura originales pero evolucionando hacia un baile más elegante y refinado.
Grandes escritores como Shakespeare o Cervantes mencionaron el Tajaraste en sus relatos, mientras que Lope de Vega lo llevó al escenario en tres de sus obras teatrales. Los tratados de danza más importantes de la Europa del Renacimiento hablan del tajaraste, y gracias a ellos sabemos cómo era. Los bailadores de pie frente a frente en dos filas y dando pequeños saltos y tacones, se acercan y alejan unos de otros siguiendo un ritmo de breve esquema.